lunes, 23 de noviembre de 2020

La sagacidad de los cidios

 Pareciera que hoy habré de embarcarme en una historia de la guerra de las galaxias pero no es así;  me concentro en el sufijo cidio que viene del latín y del verbo caedere que significa cortar, matar y cuya utilización es más que justificada por el ahorro proposicional de una decisión, en vez de decir "yo me mato" o auto mato que significa lo mismo pero suena rarongo, digo, me "suicidio". Las autoridades investigativas y el común dirán suicidio, ahorrándose una retahila sobre el auto cese o sobre la ocurrencia del hecho. Y aparecen miles de palabras con el sufijo arraigado: Parricida ─que parece algo que hacen en Medellín los motociclistas de la comuna Nororiental─ es el asesinato de un pariente, en especial padre, madre, hijo, hermano o cónyuge, que, claramente es un familiar; aparece el fratricida que es aquel que asesina a un hermano o frater, que existe también filicida, el o la que mata a su hijo y el genocida que ─no es misión imposible─ puede darse: "El pueblo español fue genocida en la violenta conquista" muchas razas quedaron extintas, pero Adolf no fue un genocida en sí, los Judíos subsisten. La palabra también es válida si la matanza es generalizada o muy amplia, entonces, Adolf si fue un genocida, porque ese genos es de raza o tribu, aunque para ello tenemos más bien los etnocidas. La situación, duelale al que le duela es que la palabreja existe y se usa para definir, cientos de cosas de manera muy simple: magnicidio es quien asesina a una persona muy importante ─indicativo de que nadie cometerá un magnicidio en ti─ y existe regicidio que es el asesinato de un rey o reina, no hay dos palabrejas distintas, regicidio incluye los dos géneros de la realeza; también hay deicidio que es el asesinato de un dios, nadie puede cometer tan magno acto, porque los dioses son imaginarios y eso ya sería un imaginicidio y que me perdonen la palabra y la construcción tan vaga y tan sin caché. Con el latinajo caedere puedo construir: infanticidio, matricidio, feticidio y conyugicidio, que aunque a mí no me gusten, significan matar a un niño, a la madre, a un feto ─lo mismo que abortar que también suena bueno y parece película de espias─ y al esposo o esposa y, claro, con ella, con la palabreja latina, puedo construir otras palabras, con otros afijos y prefijos griegos y latinos sin incurrir en exceso o en error. agrícida es el que mata el campo; egócida el que mata un ego; adenócida el que mata una glándula; gonócida el que destruye ángulos; orócida el que acaba montañas... yo quisiera ser hagiócida como filócida e himenócida ─por santo, amor e himen─ pero se forman palabras tontas como necrócida o pseudócida. Yo iba era a que existe para determinar la muerte de la esposa la bella palabra uxoricida, aquí útil solamente para la esposa según mis fuentes y ahora se inventan "feminicidio" que reemplaza a un homicidio y que hace aparecer, por derecho de igualdad, un osicidio, perricidio y hormiguicidio, un morenicidio o negricidio y por contraposición albicidio y mesticidio con indiecidio, costeñicidio, paisicidio, jovenicidio y viejicidio. "En la esquina de mi casa se cometió un imberbicidio". Para la cantidad también deber haber palabra: monócida es el que mata a uno y duócida el que mata a dos, cómo octócida el que mata a ocho. Yo supongo que todas terminan siendo válidas por aquello que mencionaba de la igualdad, lo que no me queda claro es qué relación genial hizo el inventor o inventora de la palabreja ¿debió escurrir su cerebro para hallarla o fue un acto del azar o tal vez una epifanía o le ocurrió como a Kekulé que se la susurró un sueño? De todas maneras dejémosle la tarea de determinar la validez de la palabra a otros, que a mí me suena completamente desfasada, puerilmente construida y toscamente acomodada para resaltar que el muerto era hembra o por lo menos que profesaba ese sexo ─que Shakespeare asegura que los muertos no tienen género─ pero con la alcahuetería sexual ─con la que estoy plenamente de acuerdo desde el punto de vista evolutivo─ deberemos preguntarnos: ¿Si era una pareja de lesbianas hubo uxoricidio? ¿feminicidio? Si era una pareja de homosexuales constituída por dos hombres y por como se trataban ¿pudo ser regicidio? y lo más importante ¿si era un transexual o travesti el asesinado, se vale usar feminicidio o se sentirán ofendidas las mismas féminas? El único pero que me queda es el de dedicarle mucho tiempo a escabrosidades que no valen la pena. Tanto han luchado las mujeres por la igualdad para cerrarse en que el asesinato de un homo es diferente si se ejecuta en hombre o en mujer.


PS: Mucho cuidado que hay palabrejas cuyo final cidioso no viene de caedere, como estilicidio y proboscidio que se escribe, si señor, con sc.

PS 2: Los cidios se ven crueles, pero en nuestras casas tenemos arsenales contra ciertas criaturas que no nos parecen así: germinicidas, bactericidas, fungicidas, virusidas y que aclaran que, si señor, usted y yo cometemos genocidio de bacterias y es un bactericidio, germinicidio ─cosa curiosa que si le quitas la r se parece tanto al vocablo que hoy tratamos─ fungicidio y virucidio o mejor, un asesinato múltiple de estos microseres.

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