"Una imagen vale más que mil palabras" y si así fuera pague con la imagen de una tarjeta de crédito y se dará cuenta de lo absurdo del dicho, pero si aún así no me cree, coloque en una subasta una imagen de la Monalisa y agruéguele mil palabras y, con seguridad, le darán más plata por las palabras, ahora, que una imagen represente mil palabras o pueda ser definida con más de mil palabras no es aliciente, porque a pocos pueden escribir esas mil palabras en el país de los gañanes, pero trate de comprar un policía con la imagen fotocopiada de un billete y verá que ahí si le valen más las palabras.
"Al que le van a dar le guardan" y ahí si no me le apunto, si me van a dar que no me guarden que "el que guarda comida guarda pesares" y "volador hecho volador quemao" o mejor que no dejen de darme hoy lo que me quieren guardar para mañana.
"Más rápido cae un mentiroso que un cojo" Mentiras, vivimos en un mundo de mentiras, sin ellas no habríamos evolucionado hasta este punto, un cerebro especializado en mentir es más apto por la cantidad de actividad que debe realizar y el pobre cojo también miente, por tanto la frase es "más rápido cae un mentiroso cojo" o un cojo mentiroso, que es redundante.
"Al que madruga dios le ayuda" ¿Que indudablemente quien así lo hace tiene más tiempo para todo? vaya, pero de nada le sirve madrugar si los almacenes los abren a las 8, además "al que madruga le da sueño", pasa rabias y espera en filas; el que no madruga, duerme más, pide disculpas y generalmente se ahorra las filas.
"Más sabe el diablo por viejo que por diablo" El diablo es viejo lo que lo hace sabio, entonces un diablo viejo es más sabio y si decimos diablo decimos viejo y sabio, pero si decimos viejo, no necesariamente decimos diablo, pero si sabio, lo que lo hace un diablo y, por tanto, el refrán es un pleonasmo.
"Ver la paja en ojo ajeno y no la viga del propio" En tiempos bíblicos pasable, edad en que los espejos eran sólo para los ricos que podían pagar la plata bruñida o el bronce, en la actualidad un espejo está al alcance de todos y ahora podemos ver la viga en el ajeno y la más mínima paja en el propio, el problema se transfiere a si queremos ver la tal paja o le pagamos a un cirujano plástico para que le ponga silicona.
"Loro viejo no aprende a hablar" y hasta sí, eso de andar menospreciando las capacidades de los ancianos es bien malo. Hay loros viejos que no quieren aprender a hablar, pero póngales un lector de cerebro ─TAC─ y verá que las partes que se iluminan son las de la imaginación y seguro la parte que emite las vulgaridades.
"El día de la quema se ve el humo" Eso fue verdad antaño cuando las pólvoras tenían un alto contenido de carbón y azufre. Hoy por hoy las pólvoras sin humo inundan el mercado y a más, haga una fogata y vera que el humo no se ve sino le echa una madera verde o unas hojas secas. No siempre el día de la quema se ve el humo y no siempre el humo indica quema, vaya a una fiesta Hipster y se dará cuenta de lo que digo.
"Después de ojo sacado no vale santa Lucía" Falsísimo de todos los falsísimos, mientras el nervio óptico esté sano, siempre podremos aspirar a un ojo subdesarrollado comprado en un banco de órganos del bajo mundo. Y aún sin el nervio aspiramos a que unas células madre sean capaces de reproducir el tal nervio, definitivamente es un refrán obsoleto.
"El sol sale para todos". No, sale para una mitad, en la otra mitad está oscuro, así que si hacemos claridades, la mitad estás sin sol y el refrán es: "El sol sale para la mitad y después para la otra mitad".
"Soldado avisado no muere en guerra" o "Guerra avisada no mata soldado" No, los que mueren en las guerras son civiles y animales de mal vivir. Claro que ambas frases son falsas y lo que dicen sin sentido. Las guerras avisadas matan soldados y el soldado avisado, se prepara, pero nada impide que muera.
Ya no hablaré más, me cansé. De lo que si estoy seguro es de que la sabiduría popular debe renovarse y pensarse un poco y a mí las sabias frases sólo me sirven para defenderme y de vez en cuando atacar a los que me salen con alguna frase que de inmediato refuto y pongo en cintura, misión por lo demás puramente de objetor de conciencia.
"Ver la paja en ojo ajeno y no la viga del propio" En tiempos bíblicos pasable, edad en que los espejos eran sólo para los ricos que podían pagar la plata bruñida o el bronce, en la actualidad un espejo está al alcance de todos y ahora podemos ver la viga en el ajeno y la más mínima paja en el propio, el problema se transfiere a si queremos ver la tal paja o le pagamos a un cirujano plástico para que le ponga silicona.
"Loro viejo no aprende a hablar" y hasta sí, eso de andar menospreciando las capacidades de los ancianos es bien malo. Hay loros viejos que no quieren aprender a hablar, pero póngales un lector de cerebro ─TAC─ y verá que las partes que se iluminan son las de la imaginación y seguro la parte que emite las vulgaridades.
"El día de la quema se ve el humo" Eso fue verdad antaño cuando las pólvoras tenían un alto contenido de carbón y azufre. Hoy por hoy las pólvoras sin humo inundan el mercado y a más, haga una fogata y vera que el humo no se ve sino le echa una madera verde o unas hojas secas. No siempre el día de la quema se ve el humo y no siempre el humo indica quema, vaya a una fiesta Hipster y se dará cuenta de lo que digo.
"Después de ojo sacado no vale santa Lucía" Falsísimo de todos los falsísimos, mientras el nervio óptico esté sano, siempre podremos aspirar a un ojo subdesarrollado comprado en un banco de órganos del bajo mundo. Y aún sin el nervio aspiramos a que unas células madre sean capaces de reproducir el tal nervio, definitivamente es un refrán obsoleto.
"El sol sale para todos". No, sale para una mitad, en la otra mitad está oscuro, así que si hacemos claridades, la mitad estás sin sol y el refrán es: "El sol sale para la mitad y después para la otra mitad".
"Soldado avisado no muere en guerra" o "Guerra avisada no mata soldado" No, los que mueren en las guerras son civiles y animales de mal vivir. Claro que ambas frases son falsas y lo que dicen sin sentido. Las guerras avisadas matan soldados y el soldado avisado, se prepara, pero nada impide que muera.
Ya no hablaré más, me cansé. De lo que si estoy seguro es de que la sabiduría popular debe renovarse y pensarse un poco y a mí las sabias frases sólo me sirven para defenderme y de vez en cuando atacar a los que me salen con alguna frase que de inmediato refuto y pongo en cintura, misión por lo demás puramente de objetor de conciencia.
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