viernes, 20 de octubre de 2017

La probabilidad del promedio

Las masas siempre me han aterrado a tan grado sumo que les rehuyo en cualquiera de sus formas, por eso no deja de molestarme esta salvedad que debo hacer en cuanto al discurso diario. Me refiero a que mis disertaciones generales, mis argumentos no venales, invocan el principio de probabilidad estadística y de promedio, es decir, cuando digo: "Los niños humanos no nacen llorando" me refiero a una situación estadística: el 98% de los niños humanos nacen en silencio y sólo un 2% -juro que debería ser más al atravesar ese estrecho paso cervical o al saber a que clase de mundo venimos- nace con el llanto en boca. Si digo que la gente odia las matemáticas y hago un conteo de los que las aman, ese conteo me dará inferior al 50% de los presentes, no excluyo las demás posibilidades: posible pero improbable; seguro o nulo o muy probable; ¿se imaginan el problema que se echa uno encima si quiere hacer todas esas salvedades cada que habla? La gente odia las matemáticas, pero un gran porcentaje cree en ellas a la hora de subirse al bus y recibir la devuelta y bien o mal hacen sus cuentas aunque sea con los dedos, otro pequeño porcentaje, aunque casi insignificante, lo que es mas posible y reprobable creen en la matemática, pero no entienden un pito de sus principios y propiedades y un reducido porcentaje ama la matemática y están seguros de entenderla, pero nanay, a duras penas suman y restan. Existiendo, claro está, un extremadamente reducido porcentaje de hombres que aman la matemática. ¿Vieron? Igual pasa con toda afirmación o negación: ¿Sabe alguien cruzar la calle? Es seguro que si están acá donde hay miles de calles, minimamente conocen las base de pasar una calle; aunque existe la probabilidad de que un pequeño porcentaje no lo sepa y estén vivos de puro milagro lo que es probable y no imposible y que la gran mayoría mire a ambos lados para pasar la calle pero independiente de lo visto pasan la calle -les sucede a los canguros y wallabis en Australia- y a veces se salvan, como decía, de puro milagro. Es seguro que algunos no saben cruzar una calle y es probable, en alto grado, que la mayoría hizo curso con los padres de "así se cruza una calle". Para no tener problemas, mi salvedad consiste en sacar un promedio y mi promedio es bien pesimista: por ejemplo ahí se pueden entender mis famosas frases de: "montón de idiotas" "no hay un maldito policía bueno" "todo el mundo miente" o "todo el mundo roba". Tal salvedad debe hacerse para evitar recibir por el interno o en carta corregida y sellada, que mi posición es falsa y desventajosa para aquellos que no cumplen con las aseveraciones que hago. Ya hablé yo de absolutismos "todo" "nadie" "siempre" esos existen pero en el lenguaje social la variabilidad es mucha "No existe nadie que vuele" y el idiota me llama la atención y me dice: "en avión" o "en parapente" o "cuando se chuta"... La verdad es que sigo diciendo que el promedio de la humanidad es más que idiota y la probabilidad de que yo esté equivocado es muy baja y cercana a cero y, en promedio, soy apenas un escritor mostrenco con pocas dotes de genuflexión y muchas de genio pronto y por eso cuando se me catalogue una frase, por favor, piensen en "de manera promedia".

domingo, 15 de octubre de 2017

Traductor de canciones

Hay que hablar de cosas nimias y a mí no me ponen la pata para hacerlo porque soy Ph D. en escatolalia o escatografía si gustan y debo poner en papel mi teoría sobre lo que quiere decir una canción. Una vez le preguntaron a Gabo si "Cien años de soledad" era una alegoría a Colombia y si Macondo era Macondombia y que ¿Qué quería decir? Él respondió que no había querido decir nada y que simplemente era una novela y sanseacabó. El que haya leído la novela sabrá una verdad irremediable. ¿Y una canción qué quiere decir? Pues a la mejor nada y sanseacabó. Pero yo le traduzco unos trozos: Por allá en los 80's sonaba una canción de Francis C, que se llama "la dama feliz" y algunos pensaban que la canción era una maravilla por decir que "estoy harto de dar la razón al que luego me pisa" "estoy harto de hablar sin mi voz y reírme sin mi risa" pero cuando yo les decía que era la canción de un suicida me hacían preguntarles ¿Quién es la dama que siempre se ríe? y don de no pasa el tiempo "porque hay estrellas aun en su noche azul y nieve en su jardín" pero más importante "su casa de madera respira paz". Los autores quieren decir algo y ese algo no está oculto, miren por ejemplo aquellas de Sandro donde descaradamente le pide sexo a la escucha "dame tu cuerpo y dame vida"... "soy el dueño de tu fruto y el molino de tu amor"... "Dame tu surco y dame vida"... "ya es mío tú trigal" O el grande poeta Silvio Rodriguez en "Rabo de nube" "en la caricia falta un viaje a la humedad" O unos más descarados que piden nalga en primera persona "Te busqué en mi auto rojo a las seis llevaba un frac muy nuevo que en verdad no me quedaba muy bien" (¿habrá que explicarles lo que es un "auto rojo" y un condón ajustado?) "tomé por la ruta que va al sur" (también es obvio para mí que el sur queda abajo) "juré por mi amor de que atrás la vamos a pasar mejor" "si a ti te da igual date la vuelta" -sin palabras-. Por el estilo hay una lista de canciones que son difíciles, como decir que Silvio le dedicó "el unicornio azul" a un blue jean marca "Unicornio" que le robaron del alambre donde tendían la ropa y la gente traduce todo eso como la mejor canción de amor y la persecución del imposible: "te dedico el unicornio azul de Silvio". Ahí les queda, aunque no es ninguna defensa que pueda usarse para hacer apología a atrocidades como el "garretón" e incluso a algunas canciones de rock. Yo defiendo el rock metralla, el rock disparo, el rock que dice y no necesita un traductor, pero en mis acústicos he empleado muchas analogías, símiles y comparaciones y el que necesite un traductor para alguna de mis canciones si anda es muy mal, claro, el autor quiso decir una cosa y el que la escucha es dueño del deseo del otro por sobresalir y puede interpretar como se le de la gana. Pero alguna vez en el parque del periodista un joven me dijo que no me escuchaban a mí porque nuestras letras eran muy complicadas, yo le pregunté que si le gustaba la polla y cuando me dijo que si porque la polla era rock fácil y decía las cosas muy claras, le pregunté por la canción "fin de siglo" y le pedí que me la explicara, me dijo que ahí no había nada que explicar y que todo estaba claro "Dicen Europa del este la tierra es redonda y yo no entiendo na, nos chorizamos algo del plutonio la ciencia no cobra pero tiene que vivir" como quedaría cuando le expliqué que la canción fue hecha en la Glasnost de Mijaíl y que los científicos debían robarse "chorizarse" el plutonio y venderlo al mejor postor porque la ciencia no cobra pero tiene que comer. No quise explicarle la transparencia ni la caída del comunismo soviético -Europa del este- pero le dije que me explicara el resto de la canción, No tanto eso de "tomémos algo por nuestros colegas por vivos y muertos nos tomamos dos" ni lo de lo lenta que es María Pureza después del sexo y por eso viene el embarazo no deseado, sino aquello de "y luego hablemos de la arqueología, la piedra del costo que se nos perdió" cuando me dijo que eso no quería decir nada, que era un relleno para la canción, me "totié" de la risa y ya no quise ofenderlo más, porque España le debió pagar a Inglaterra por la estatua del siglo III antes de nuestra era llamada "La Dama del cerro de los Santos" y por la otra "Dama de Elche del siglo V antes de nuestra era para que se las devolvieran y poderlas exhibir donde hoy están -arqueología y pagar deben decir algo del costo- un infierno de libras para que se las devolvieran, porque Inglaterra fue a España lo que España a latinoamérica. Si señores, empecé en Pereira y terminé en Pasto. No hay necesidad de pensar que nos dicen ciertos autores, pero el rock es una consigna y lo hay intelectual y contestatario y agresivo y no necesita traductores, necesita pensadores, que gritar y brincar no sea la única consigna.

sábado, 14 de octubre de 2017

¿Ama el universo la claridad?

Yo sé que uno se pega de cualesquier tontería para escribir, pero ayer me dio tentación de risa escuchar esta frase, en tono afirmativo, entre un trío de creyentes. ¿por qué sé que eran creyentes? porque el comentario mínimo era "gloria a dios" y se invitaron a una tarde en casa de una de ellas a hacer un "rosario bien bonito" y hasta puede ser que sea que hablaban en clave para despistarme y lo que iban era a hacer una parranda con orgía incluida, aunque dudo del caso queda abierta esa propuesta. Yo quería bajarme, pero era el último bus del pueblo y caía una tormenta. Quise dormir, pero también me fue imposible conciliar el sueño. Lo que son "los designios del señor", tuve que oír esta frase y casi caerme de la silla de la simpleza que la esgrimía y como ven acá llegó a la palestra de los insermos y, aunque sé que una señora de esas jamás leerá mis líneas y nadie se atreverá a bajarlas del limbo creyentista y que los pocos que me entiendan la teoría no les va a importar -soy un sufí idealista que cree que a su alrededor sólo hay idiotas- ahí les va la disertación filosófica (también soy engreído). El universo ama la claridad y por eso creó a las estrellas y a la luna, creó a Edison que luchó contra la oscuridad en variadas formas y permitió que Prometeo se apoderara del fuego para darlo a los hombres, es obvio que el universo ama la claridad y por ello puso sobre la tierra hombres santos que condujeron a la humanidad siempre hacía la luz... Habráse visto, claro que el universo adora la claridad, por eso premia con supervivencia a la más oscura de las razas: la de los capitalistas; le ama tanto que el primer homínido debió ser negro, oscuro como los ojos de mi caballo y de él surgieron las razas puras que más tarde se jugaron el mundo e impusieron su supremacía. Si, el universo ama la claridad, pero dotó a esta tierra de un mar oscuro, negro  y abismal que ostenta un 75% de su superficie y al cielo que plaga 12 horas de nuestro día le puso una luna que no brilla siempre y que nos sumerge en un mar de tinieblas que nos hacen retroceder automáticamente hacía la luz de la fogata o a las sombras del sueño, negras también.  Adora la claridad a tan alto grado, que creó un grupo de santuarios hipermasivos que no permiten que de allí huya tal claridad y por ello son casi invisibles a nuestros ojos. Les llamamos agujeros negros, pero la probabilidad de que sean negros, no siendo vaga, aún no es decisiva, pero lo que si es cierto es que no son claros. Ama tanto el universo la claridad que al momento mismo de la creación inundó el espacio con una materia que sustenta el giro extremo de las galaxias y planetas y que es, 6 veces más masiva que la materia que reluce; ama tanto la claridad que para impulsar las galaxias en expansión infinita lejos de su centro, se permitió una entidad, que debemos llamar "oscura" porque no la vemos, pero que debe ser tan grande que acelera constantemente a las más lejanas y cercanas galaxias y cúmulos de ellas: la inmensa y mal llamada "energía oscura" el dulce 75% del universo. Si es definitivo, el universo ama la claridad y yo deberé repetir que prefiero quedarme en la oscuridad, porque los que dicen seguir la claridad, están deslumbrados y enceguecidos por la luz.

viernes, 13 de octubre de 2017

Perdida la esperanza

Dicen que cuando Zeus quiso vengarse de la familia de Japeto por las rebeliones de que aquella raza de egregios liberadores le hizo participe, a uno lo puso a cargar el mundo, a otro lo condenó al Cáucaso en destierro y saquis de entrañas diarias, a otro le envió al érebo y al último, le mandó una muchacha hermosa con muchas cualidades y defectos y una caja en la que estaban todas las pestes y zozobras y al final, muy al fondo, la esperanza.  Cuentan que todas las pestes escaparon y que aún, en el fondo, está la esperanza. Bonita leyenda!!! A mí no me enviaron a la tal Pandora, nunca vi a los jinetes del apocalipsis, la peste no llegó a mi puerta y crucé la cincuentena sin una enfermedad mortal declarada y sin mayores problemas. Mis hermanos no fueron sicarios ni vendedores de droga, ni se les ha decretado la muerte por funesta enfermedad -seguro más adelante ocurrirá- aunque de seguro ya todos cargamos el cáncer que nos da la vida. No quedé huérfano joven y aún mis padres viven. Aún no soy huérfano y ya serlo a mi edad, suena como estúpido o anacrónico. La más grande separación de mi vida fue representada por mi abuelo y, a decir verdad, ni siquiera asistí a su entierro. Nunca me han llamado la atención esas demostraciones de afecto al cadáver que ya no siente ni oye y al no ser creyente, todo rito instaurado por religiones me llena de tedio y de asco. No dudo que sea una de las cosas más hipócritas que realizan los queridos humanos, su congoja y gran sufrimiento nada tiene que ver con el occiso, se trata de  la auto compasión y el duelo por un momento que tarde o temprano les habrá de llegar. No he padecido enfermedades y mis visitas a un hospital se han limitado a unas cuantas suturas y a solicitar un que otro desinflamatorio o medicamento para el dolor. También un hospital me parece deprimente, allí te tratan de tal  manera que la dignidad humana, dado que tal cosa exista, se hace completamente nula. Odio visitar o que alguien me visite en tal sitio; la verdad es que al final, odio las visitas en general. En fin, no tengo una casa o una finca o un gran vehículo. Disfruté del amor de muchas mujeres y con cada una viví una historia en la que dejé parte de mi vida y de las cuales me sentí orgulloso. No fue sexo por sexo, sino toda una historia con vericuetos siniestros y enredos pasionales; es definitivo, no me quejo de mis pasiones aunque ya poco me llama la atención dedicar tiempo a la conquista y al preludio y más aún al post conflicto que de tales encuentros surge. En resumen le perdí el amor a la cosa. Mis posesiones son nimias y a mi edad siento que la vida se me fue en otras instancias. ¿Ya para qué un espacio de distracción o recreación, cuándo la recreación sólo es la misma que puede tener un crío? (descontando hacer esfuerzos muchos o tardar bastante en el culumpio). Ya no puedo beber, ni gritar, ni moverme demasiado rápido, saltar o conquistar una chica, a condición de no tener que visitar un hospital o llegar prematuramente a la tumba. ¿Prematura? Los amigos que conquisté en la juventud desaparecieron o yo me alejé de ellos y sólo quedan un grupo de muchachos cuya finalidad no pasa de ser la que consumió la mía: sexo, droga y rock'n'roll. No es raro que no deseen verme o compartir conmigo en tiempo fuera de ensayo o en lo que llaman "días especiales" Un viejo con una guitarra que sólo se sabe las mismas cuatro canciones y mal tocadas no es ninguna gracia. No me afecta demasiado. En serio, siento es el vacío y la necesidad de dejar espacio a quienes lo solicitan; no de suicidarme por favor, en ese aspecto soy un cobarde, lo que debo es retirarme, entender que mí época tocó a su fin y lo que me resta es pasar los días que me quedan rumiando las historias que viví. ¿Con quién habré de compartirlas? Pues acá se las dejo como legado, porque el afán de escritura no se me ha perdido y podrán notarlo en la fecundidad. Aún tengo mucho que recordar y decir, pero ya nada que aportar a la aventura. Hace años decía que aquel que vive recordando es porque ya se siente inútil para hacer y así me siento, ergo, siéntome a recordar. Eso si, quede claro que la tal esperanza no la necesité, ni me hizo falta y ahora menos, así que qué importa que la susodicha se quede atorada en la caja, yo no pienso quemar incienso en dioses. Es un desperdicio.

domingo, 8 de octubre de 2017

No existo

Ya me he burlado de una propaganda salida en mi niñez que decía que lo que no estaba en las páginas amarillas no existía. Hoy día las páginas amarillas no existen porque no están en internet. Eso si, si lo que está en internet existe, entonces hay demasiados arrogantes, extraterrestres, creyentes, dinosaurios, fantasmas, espantos, brujos, ciencia falsa, aparatos inútiles y la parte buena de la red: conocimiento fácil, gratis y barato. No siempre la verdad, pero si un punto de vista. Existen unas reglas para no dejarse llevar por la fascinación de una teoría sin antes someterla a un juicioso examen. Más de uno ve una bobada en la red y la difunde sin pasarla por el tamiz de la verdad -tema de otro blog- y por eso se publican muchas veces bobadas y falsas premisas -casi siempre- pero esa no es la cosa de hoy. Imaginen que por un momento, alguien ingresó en mi perfil de "facebook" y decidí cambiar mi contraseña y darme de baja para darle satisfacción al primero que me lo cerró, lo hice y pude descansar de intrigas, de comentarios mal intencionados, de falsedades, de celos, de grupos, de preguntas ambiguas, de insultos e incluso de halagos y de buena fe de algunos. Yo soy un convencido de la inutilidad de las celebraciones y de las fiestas a no ser que sean una interacción social que redunda en más interacción social y sexo... Le corresponde al modelo de evolucionismo puro, pero quien no crea en tal, libre es de creer y experimentar lo que a bien le venga en gana. Logré pues, zafarme de las redes sociales y mi "whatsapp" lo separé a una "tablet" que no cargo pues mi celular es lo que se puede llamar un "dumbcell" y no posee las características del otro que usan muchos. Además no contesto el celular sino en casos muy extraños, nunca a un número desconocido y escasamente a un número conocido, tanto que mis amigos me han dicho: "para qué da ese número sino contesta, más bien no de nada". De acuerdo estoy, aún así no falta el inocente que me pide un número de contacto y yo le doy el número. Sigo con un par de correos y mis blogs, ya que, gracias a la magnanimidad de mis "fellowships" me fabricaron una página independiente que no depende del perfil y ellos mismos la manejan, cosa que les agradezco infinitamente porque sino, sería un cero a la izquierda. Desde allí, quien desea escucharme o contratarme a un evento o incluso saludar, lo hacen y reciben la contestación de alguno de mis "fellows" con lo cual yo siento que puedo volar sin estar pendiente de nada de lo que se mueve en la red, a excepción que me interese, esta semana hice un curso de "lockpicking" y hasta tuve tiempo de fabricar mis propias ganzúas y practicar ampliamente. Lo que resulta es que la semana pasada cumplí años y absolutamente nadie lo recordó. A mí eso me importa un carajo, pero es la primera vez en mucho tiempo que puedo pasar ese día, sentado al frente de mi casa oyendo pájaros y el ulular del viento y viendo a los pinos mecerse. Pasó una persona que tiene un sembrado en esa zona y me dijo: "¿A usted no le hace falta la musiquita?" "¿se divierte ahí sentado solo?"  No le respondí porque estaba "enmimismado" y la verdad no hacía falta respuesta. Llegué a Medellín y no me impresionó en absoluto que nadie me dijera nada y lo mejor de todo, me importó un pepino, hasta yo ese día vine a recordar que había dado una nueva vuelta al sol por un mensaje que me entró después de las dos de la tarde, de resto, sin novedad. Yo he pintado mi casa: Un extramuro en un bosque donde escasamente llega el agua, una guitarra y un teclado, una planta para mantener los alimentos frescos: ¿radio? ¿redes sociales? ¿televisión? ¿grabadora? ¿señal de celular? eso no se da allá, más por la zona boscosa y alejada, pero en un futuro será por regla mía, que quien asista abandone toda esperanza de comunicarse con el mundo exterior, que retroceda a la edad de las cuevas y se enteré de que no estando en las redes, no se existe y que además, se vive una extraña sensación, grata por cierto, de exilio y de rechazo por todo lo que hace feliz a un mundo narcicista y vacío.

lunes, 2 de octubre de 2017

Deo optimo maximo

Vean, perdónenme esta y otras dos o tres, pero no me aguanto las ganas de hacer una crónica más del papa, resulta que apenas publicaba la tercera entrega cuando me cuentan esta primicia y aunque yo soy incisivo por naturaleza, no me gusta andar detrás del mismo pato siempre y la actualidad hoy es el terremoto de México y el dichoso centésimo quincuagésimo sexto fin del mundo anunciado por cadenas y periódicos del planeta y auspiciado por toda sarta de crédulos, mamarrachos y fafarachos de toda índole y especie. Ya ofrecida la disculpa me voy con mí reseña histórica. Y a todas estas resulta que don pope dizque sufrió un accidente en Colombia y que casi tienen que ser intervenido de urgencia en el mismísimo papamóvil. Resulta que cada periódico expuso la noticia de la manera más dramática posible, creando un halo de religiosidad y consecuencia "del gran sufrimiento y terrible hinchazón que tenía el sumo pontífice en su lacerado rostro por saludar a un pequeño huérfano de una de las comunas más pobres de un sector de Cartagena" o "El sufrimiento y conmiseración de un hombre que daba su vida por saludar a ese pobre a quien tanta falta le hacía esa bendición" y supongo que ha de ser por la misma razón que a todos les hace tanta falta, después de esa bendición, puede considerarse extremaunción y morir de hambre, pero en la más absoluta tranquilidad: "me bendijo el papa". El niño de seguro ni está enterado todavía de lo que significa ser católico, apostólico y romano y ya es una leyenda y cuando crezca le dirán: "vea, por su culpa se "aporrió" el popi" o algo así. A la señora que le prestó la casa le harán peregrinación por muchos años, hasta que la idea de que don pope se echó agua en la cara en su hogar y la toalla con que se secó perdurará en el altar de la casa de doña Lorenza, ni el jabón lo vuelven a usar con lo coloquiales que son, tanto los colombianos, como los creyentes. Oiga, yo tengo una "Question" ¿Si al papa le da ganas de hacer popis o pipis, el papamóvil ese tendrá letrina? Yo no veo espacio para serles sincero y dudo que el magnánimo no defeque y ensucie del mismo color que todos y hasta del mismo olor, supongo que un poco más santo y que con tales unturas alguien pueda recuperar la vista y hasta curarse de alguna que otra infección naso oto ocular porque ni de fundas una herida abierta debe ser cubierta con tales mixturas, a menos que el pope tenga escherichia coli divina. Que pena me perdí de mi objetivo principal pero ahí les queda la pregunta ¿Dónde chichisea el pope? o será que la sotana que usa es como los trajes espaciales que tienen su sistema de evacuación o su pañalito de alta absorción, yo la verdad el traje tampoco lo veo "embombao". En fin. Al grano, maldita sea. El señor pope sufrió un accidente en Cartagena y lo que yo vi fue así: El grandísimo hombre mandó la mano a una ventana lateral y, aunque el vehículo en cuestión no iba a mas de 10 kilómetros por hora, se resbaló como cualquier hijo de criada y fue ligeramente impactado por su propio móvil, aunque fue él quien golpeó al móvil, podemos considerar la relatividad y observarlo desde el otro sistema de referencia y asegurar que a don pope le dieron un papamovilazo, del cual obtuvo una ligera hinchazón y unas gotas de sangre que la gente emuló como la corona de espinas del cristo redentor crucificado pero donde no hubo más que la torpeza propia de un anciano en su senecta senectud o mejor dicho ¿qué querían? que el señor Bergoglio se golpeara y como por arte de magia no le pasara nada, se espera eso de los dioses no de los mortales, pero la increíble manía humana, la necesidad de un ídolo y de una razón para tal, la agobiante exigencia de contacto social y de tener algo que decir y que compartir, nos lleva a la creación de ideales que no pasan de ser eso. El día que nos toque el "guascazo" aguante y diera uno brincos que en cualquier casa le regalaran a uno agüita y le prestaran el baño para no tener que pagarle multa a esos bandidos de la policía.