El ocio es la madre de todo y de todos. Yo sin nada que hacer leo cualquier cosa y esta mañana me encontré con un artículo que anuncia ¿Por qué los paisas me caen mal? y no es un ataque al egocentrismo paisa, es una adulación, permítanme los ilustro con la entrada comillada: "Me caen mal porque viven en aquella hermosa ciudad, de clima perfecto y hermosos paisajes. Porque llevan la belleza en la sangre, tanto que hacen ver hermosas hasta a las gordas de... Me caen mal porque hablan con ese lindo acento que acompaña su eterna, amable y cálida sonrisa, y porque son gente tan valiente que ha salido adelante a pesar de las duras pruebas que les ha tocado vivir." Descomillo. Ahora fíjense y pongan a leer esto a un rolo, a un opita y a un caleño, a un bumangués, a un manizalita y a un payanés. Puras malditas frases genéricas que se aplican a cualquiera ciudad en cualquier parte del mundo. La ciencia les llama frases barnum por un halagatontos que las popularizó y también les llaman "falacia de validación personal" o efecto Forer y así mismito sigue durante toda la redacción que se aplica a cada "sufrido pueblo" en el mundo "cuyo sistema educativo y de transporte son dignos de admirar" "desde cualquier parte obtienes vistas increíbles" y finaliza: "Y asegurarles que quien viaje a ... tendrá muchísimas oportunidades para maravillarse con su belleza". La humanidad busca el halago, quiere el halago, ama el halago, lo desea infinitamente. No tengo controversia por este estilo más que porque quienes tienen la facilidad de palabra y memorizadas cuatro frases, ya pueden enfrentarse al mundo y ser aceptados, conquistar la chica que quieran y caerle bien a los suegros, ya pueden lanzarse a la alcaldía o a la gobernación o presidencia de cualquier territorio. Los que poseen la facilidad del halago y la frase barnum como ideal, son los que "nunca quedan mal con nadie" a fuerza de parecer Ilegal, son los que están en el cuadro de honor y encabezan la lista de los destacados y hombres de bien de cada nación. Cada región, cada país y cada contienente siente orgullo de tierra y de patria. !Oh apátridas del mundo que saben con certeza que cada paisaje es representación de lo bello y común del mundo y que no hay manera de comparar una con otra¡ !Ay de los coribantes¡ Otacustas que anheláis consuelo para otros, ¿por qué lo buscáis en mí? ¿Y qué tiene la humanidad de interesante? Lo mismo, que se sienten únicos en sus paisajes, en sus representantes, en sus actuaciones y se enorgullecen de la nada que les rodea como si fuera única. Cada humanito lleva consigo el complejo al que le hicieron acreedor sus padres, el egocentrismo de masa, de cultura, de patria y el egocentrismo, punto. ¿Habrá alguno que no crea que los demás son satélites suyos? ¿que las demás regiones son su cinturón de asteroides? o que, ¿fuera de su luz nada puede estar habitado? Hagan la prueba, lo que hace falta acá no son los lamezuelas y genuflectos diaristas mediáticos, ni los redentores de fin de semana, ni los apóstoles del todotanlindo sino los críticos, los que no están de acuerdo, los que no halagan para figurar o para servir a otros dioses en pro de la demagogia o el usufructo personal. !Oh astrólogos del mundo parad¡ vade retro amanuenses horoscopistas, va via lucradores del vil arte de halagar. ¿Ahora a quién recibimos? Las águilas del verbo no temen usar la retórica para despotricar o para enconar una verdad y, en la dirección del salmón, no va Vicente, ni la hipócrita "adondefuereshazloquevieres". Que odie la humanidad es un sobreentendido.
martes, 29 de septiembre de 2020
domingo, 27 de septiembre de 2020
Cómo vender
Yo no me ando de manuales ni de cintas, ni de servicios, ni de agüeros, pero es bueno recomendar ciertos datos como en los manuales, para que alguien se encargue de ellos. A mí las ventas no me atraen ni soy bueno en ellas, pero mucha gente se dedica a ellas a nivel profesional y no sólo vendiendo jugos en la calle o batidos energéticos. Existen empresas multinacionales que se dedican al trabajo puerta a puerta y son eso, multinacionales. Yo diría que el nombre y la promoción son importantes y la empresa describe el producto. "Tecnoramón" funciona, pero no "mTxcServgrt" Debe ser fácil de pronunciar y con un lema, una página en red y servicios adheridos como buena atención y buen servicio, buena asesoría, entrega rápida, solución de problemas, en fin. Si su empresa no es una estafa, una de las cosas que usted requiere es "Good will" no ese buen nombre que trata de mercadotecnia realmente. El buen nombre al que me refiero requiere que sus clientes hablen bien de usted, que sean un ariete y que distribuyan sus buenas costumbres a muchos clientes potenciales. Para esto, justamente debería existir una auditoria, que compruebe la atención a los clientes, el trato, la deferencia y la velocidad. Una empresa de comidas que deja su cliente sentado a la mesa porque no tiene tiempo de servirle, es mala. Al cliente que se sienta, inmediatamente le debe llegar alguien, el mesero, con un entremés y con la explicación de la demora: "desea un tinto, una limonada, nos demoramos diez minutos en atenderle por..." importantísima esa razón. El cliente se sentirá incluido, aceptado y atendido y lo más seguro es que, si no va de afán, espere la atención completa. Yo me he sentado en un Pollos Mario más de cinco minutos a esperar atención —razón por la que no volví a visitar ninguno— y hay sitios, donde parecen no depender del cliente. El cliente nunca debe esperar y menos no ser tenido en cuenta, por ínfimo que sea. Aquello de que "el cliente siempre tiene la razón" es una hipocresía, pero es muy válida, si el cliente no tiene la razón, se va porque la gente es así, hay que adularlo y lamerle el trasero para tenerlo contento —otra razón por la que soy mal vendedor— Dentro de lo posible, el cliente arma su almuerzo o su producto como bien desee y lo que él quiera se puede organizar mientras sean ventas efectivas. Yo he llegado a comprar un producto y el vendedor me dice que por unidad vale X y que no vende el paquete, aunque le diga que le pago el paquete como si me lo vendiera por unidad. Uno no entiende a ciertas personas al mando de un negocio, pero debe existir una razón por la que están al lado de un negocio y es que no tienen idea de otra cosa, así que les toca vender y cuando lo hacen tampoco entienden ciertos principios básicos que son inherentes al puesto de vendedor. Si señor, cómo no, el paquete entero se le vende y le vale X por el número de unidades del paquete. Pero no, se cierran en que "no se puede vender el paquete" o llegar a un restaurante y recibir la noticia de que a esa hora ya no se sirven almuerzos, o que no hacen desayunos o que no puedo cambiar el menú. ¿dónde le cabe a un imbécil que dejar de vender es una idea buena? eso es ir en contra del patrimonio. La amabilidad debe ser obvia, que a gruñones no les compra nadie y el aseo, el orden y la buena vestimenta son muy atractivos en cualquier negocio. No faltará quien gusta de entrar a un sitio donde las cucarachas pululan, los trastos están acumulados y llenos de grasa en todos lados y los meseros tienen manchas en la ropa y las manos y la nariz sucia. Y en cuanto a la atención, el evitar la disculpa o saber que vende. Recientemente compré un PC. Terrible atención, justo después de consignar, antes fueron amables y condescendientes. Apenas hubo consignación, desaparecieron de la red y ya dizque tenían muchos clientes y qué por eso no contestaban y se volvieron displicentes. Prometieron enviar un equipo funcional con determinadas características. No llegó completo y por cada comentario había que repetir las conversaciones, enviar los diálogos, las facturas y consignaciones de qué compré y qué me enviaron. A más que me enviaron un teclado roto, le faltaba una pata trasera, no me enviaron el DVD y sólo la mitad de la memoria que pedí. "Ah no señor, sin esa pata, el teclado trabaja así que no le cambiamos nada" "ah no señor con la pantalla rota usted puede ver, por tanto no le cambiamos nada" "la memoria seguro usted no sabe cómo verla desde propiedades pero ahí está". Parecía que ninguno sabía de qué hablaba. Uno último me decía que no me podía cubrir el daño del DVD y que no existían los DD de una Tera. Yo me enojé y les dije que cómo me podían ofrecer algo que no tenían y no señor, y que yo no pedía que me arreglaran el DVD sino que me lo enviaran que nunca llegó. El vendedor juraba que necesitaba todas las conversaciones y más luego, para desaparecer por días, contestaban: "Ya averiguo que pasó con su envío" "permítame confirmo los datos" "yo le aviso apenas se despache". Y al sol de hoy estoy esperando una respuesta coherente. Por fortuna un amigo poeta y vate y abogado en ciernes, me expresa que con los datos puede hacerse una "reversión de pago" gestionando un reclamo ante el banco y sin pelear con el comerciante, que es lo que deberían ganarse esas compañías que menosprecian al cliente luego de que, ingenua y noblemente consignan confiando en el "good will" de empresa. Para las ventas hay que tener el don de atraer al cliente y hacerlo sentir cómodo y atendido, lo demás no es venta, es imposición o es engaño.
PS: La mejor prueba de mi ineptitud para vender, son mis canciones: algo más de 40 álbumes grabados, de los cuales, como mínimo un tercio deberían ser éxitos por estadística; más de 30 libros escritos y publicados, personalmente, pero cuyos dineros nunca han sido ni medianamente recuperados. Y no puede olvidarse que hoy mis entradas en blogs suman más de 1500, y quien las haya leído sabe que no son de gatitos o emoticones, son escritos puros. Incluso de "mis ideas espaciales" quise alguna vez hacer catálogo y lo hay, pero nunca comercialicé mis ideas. Punto definitivo, no soy capaz de vender un tamal en un derrumbe ni una gaseosa en el desierto y la única manera que tengo de sobrevivir es ser un obrero. Vendo mi fuerza de trabajo que también tiene su norma y su ideal.
PS 2: Otros ejemplos me han tocado, donde el vendedor se cierra a que no me vende el pollo completo sino por presas y aunque le compre las ocho presas; fue con sabores de helado que "no se venden juntos" el "macadamia" y el "Oreo" y con bolsitas de café instántáneo cuya caja no se podía vender completa. Recuerdo ese evento en especial porque necesitaba café y ante una negativa rotunda de la vendedora, le tuve que hacer traer la caja y preguntarle cuantas bolsitas traía: "48 señor" entonces, le dije, "me vende 48 bolsitas por favor".
PS 3: Yo creo en la denuncia y en la alarma, la empresa en cuestión es SITECH de Bogotá y, en verdad, no hay con quien negociar.
PS 4: Acá quedan las hijuemil empresas de telefonía móvil y servicios de datos cuyos clientes importan un soberano pepino: cobro de servicios por adelantado, retraso en las activaciones, demoras en los cobros, aumento en ellos sin avisar al cliente, imposibilidad de retiro sin el cumplimiento de mil cláusulas; algunas tan sencillas como no poder retirarse sino en la oficina principal, si está en la principal no puede ser hasta dos días después de cumplirse el contrato y eso le genera pagar otro mes porque un sólo día o parte del mismo genera el cobro de todo la factura. Si se daña o se cae la red igual hay que pagar el mes como si estuviera perfecto porque la línea de atención al cliente es capaz de quedarse 30 minutos: "en instantes lo atenderemos gracias por comunicarte con nosotros" o en enredar al cliente con mil propagandas antes de pasar al menú, que no dice nada o de comunicarte con un asesor que empieza el caso desde el principio: "Me dice su nombre por favor... cuál es su caso?". Acá repito lo que dice mi amigo David: Agréguele a eso las aseguradoras que son felices recibiendo el pago de las primas y a la hora de atender un siniestro, siempre existirá una cláusula que te excluye de su cobertura: "Si señor los accidentes de tránsito no incluyen la marca Chevrolet" "no señor el caso de "incendio" sólo está cubierto cuando lo produce un volcán activo en Islandia" "lo lamentamos el pago de su prima no se registró hasta esta mañana y por ello la póliza se invalida".
PS 5: Quisiera decirlo, aunque suene a libro de superación personal, pero hay personas que parecen no necesitar el trabajo y es ahí donde entran los asesores de imagen y los manuales de buenas costumbres: Sepa qué vende, entérese qué hace, atienda con gusto o por lo menos sea hipócrita al hacerlo, que maldita pereza que lo atienda a uno "la llorona" o "el estiratrompa" y hasta la "felizdeverte" que está en el otro lado del espectro, aún sin conocerte. "¿Qué tiene señorita?" "espere yo pregunto" ¿De qué es ese tamal? ¿De maíz? "no sé, espere yo pregunto". ¿Tiene conectores cinch? No. ¿De esos tipo RCA? no señor. ¿Cables 2 x 1? ah de ese sí a 10000. Deme uno 2 x 2. Deme una docena de remaches pop de 3/16 por 5/8. ¿Me da la medida en milímetros por favor? 4.76 x 15,87. No señor de ese tamaño no se vende. Mire, de esos que hay en aquel estante. Ah es que no los había visto. Al cliente se le permite la ignorancia y es el vendedor quien debe dar asesoría, pero eso es bien difícil.
miércoles, 23 de septiembre de 2020
Cerrar el mundo
Bueno ya habíamos hablado de los sentidos y de cómo son necesarios y hasta prácticos. ¿Se imaginan ustedes que no pudiéramos cerrar los ojos? O ¿Qué nuestros oídos captaran ondas sonoras en un rango más amplio del que lo hacen? Hiperestesia es la sensación de aumento de estímulos. Es una maravilla poder captar el mundo en infrarrojo y en microondas e incluso en impulsos eléctricos u ondas de calor. Es todo un problema si detectamos todos esos patrones en una sola ojeada o si pudiéramos ver los millones de ondas de radio y televisión que atraviesan el aire en un momento determinado. Si nuestros oídos captaran el canto monótono de cada estrella o el crepitar de un volcán respirando antes de hacer erupción. Si escuchásemos el eco de la radiación de fondo, nuestra escucha sería un eterno retumbar sobre el que aparecerían los otros ruidos para llamarnos la atención o tal vez se cancelarían unos con otros haciéndonos caer ante un predador en acecho que no pudiésemos detectar. ¿Será que en realidad escuchamos todo y nuestros cerebros aplanan todos los demás datos despreciándolos para no enloquecernos? ¿Será que vemos todas las longitudes de onda, pero nuestro especial cerebro filtra la información de ciertos rangos, el de los colores, y sólo nos muestra la información entre 400 nm y 750 nm? Parece obvio que las feromonas llegan a nuestras fosas nasales, pero los bulbos olfativos las desprecian y no causan un impulso que nos permita detectarlas, similarmente no tenemos como captar infrarrojos o microondas y menos se activa nuestro laberinto por señales auditivas que no estén entre los 20 y los 22000 Htz. Las demás señales están ahí pero, o son irrelevantes en nuestro entorno y la naturaleza las desprecia o no ha requerido nuestra supervivencia de ellas y por eso se han cancelado o son indetectables con nuestros sistemas. Nuestras consignas primarias son alimentación, refugio y transmisión de genes y al parecer no requerimos detectar más allá de lo que detectamos para cumplir esas consignas. Si nuestras parejas o el alimento sólo pudieran verse en infrarrojo, habríamos desarrollado la facultad de detectarlos. Lo observable es lo práctico, no hay manera de discutir con la naturaleza, pero ¿se imaginan que el ser humano pudiese cerrar el mundo sensorial? ¿Qué pudiésemos cerrar nuestros oídos como nuestros ojos y desconectar el tacto a voluntad? En las selvas hubiese sido la perdición para el humano, pero ¿en nuestras ciudades sería catastrófico? No dejo de pensar la bendición que sería poderse desconectar de la humanidad por ese método: caminar por la ciudad sin oírla y encender la audición sólo en el momento en que estemos interesados en el bullicio humano. Apagar la visión cuando nos hartamos de sensaciones ópticas, ya para experimentar con los otros sentidos en pleno o ya para descansar y dejar toda esa área del cerebro aplicada en otras tareas, ya para, simplemente, no ver la humanidad. Dejar de sentir el mundo a voluntad es sueño de misántropos, pero dejar de oler cuando estamos en la podredumbre y apagar el gusto al consumir, por deferencia o por necesidad frente a una droga asquerosa, algo que nos es desagradable sería una maravilla en cuestiones de tacto y de supervivencia al comer un cadáver podrido o al visitar zonas de desastre. Desconectar el tacto y las sensaciones nos haría inmunes al dolor y al amor !el sufrimiento es opcional¡ Ventaja evolutiva no creo que exista pero !qué descanso¡ !qué maravilla! poder prender el mundo a voluntad y apagarlo igualmente. Resulta una lástima qué sólo existe manera de apagarlo de una vez y para siempre.
domingo, 20 de septiembre de 2020
Yo detractor
Hace muchos años que debí escribir esta carta, una especie de propósito consuetudinario pero aunado, ya no a la disculpa, sino al rechazo directo. Por años he evitado asistir a matrimonios, quinces, reuniones, fiestas y entierros y me alejo lo más posible de cumpleaños, días especiales y patrañas comerciales. Me ha bastado mantener una línea amplia entre mis "compañeros de trabajo", mis "objetos de trabajo" y mi "familia". Apartarse de todos ellos y poner distancia cada que sea posible evita la contaminación del espacio, tanto el físico: auditivo, distancia, de contacto y charla, como el mental: autonomía, silencio y soledad. Me refiero pues a que siendo apático, escueto y directo logro evitar la charla banal de uno y otro al expresarles que las charlas sobre "mi hijo... dios bendito... sagrado rostro... gatos hermosos...niños enfermos... muertos... reuniones... y una larga lista de etcéteras, no son de mi apetencia y no me interesan. Recuerdo a la profesora Marleny viniendo a contarme que dios le había ayudado a sacar a su hija de un trance. La detuve en seco y le dije que para qué me contaba esas tonterías si yo era ateo. Recuerdo al profesor Roberto tratando de venderme ciencia cristiana: "vea profe aquí dan por hecho la evolución" extendiéndome algúna revista de su comunidad religiosa, le dejé claro que hacía mucho tiempo había dejado de leer historias para niños y que nada que tuviera que decir la religión me interesaba. Recuerdo a Alonso convenciéndome de que el MgSO₄ sirve para reparar el líquido sinovial y el dolor en las articulaciones, lo mismo que a Doña Adriana tratando de hacerme adicto a un café con ganoderma lucidum y repitiendo como bobita lo que le dijo el que se lo vendió; a ambos los saqué del medio esgrimiendo teorías científicas y estadísticas y les dejé claro lo poco que me importaba el pensamiento de personas anquilosadas en una educación vaga y sin rigurosidad. Aparte puedo recordar a muchos taxistas que cuando uno se sube tienen música, asquerosa música y al subirme a ellos, les advierto: "voy para tal parte pero sin charla y con la música apagada" algunos se van, pero yo me ahorro una rabieta en el camino. Igual pasa con el que se me acerca con un baflecito de esos bluetooth o similares: Hey viejo, si me va a hablar apague su música y si no me va a hablar no se me acerque que sus gustos no me interesan ni me interesa si se sabe la canción o el ritmo que le joroba la vida. Póngase audífonos. Es claro que el único matrimonio que recuerdo es el de mi "hermana" Luz Marina, luego de ese jamás asistí a otro por la convicción de que no puede ser seria la persona que cree que un tipo dando dos pases en el aire, limpia del pecado y firma tratados con un dios oscuro sobre fornicación. Al único entierro que he asistido fue al de mi abuela Luisa en 1982, contaba 12 años y aún no comprendía lo insulso y tonto de las despedidas de muertos que ya no las notan y lo ridículo de quienes asisten para cumplir protocolos sociales, dar pésames y sentir lo que aún no les llega. Mis tíos y tías muertos, el otro abuelo, primos y amigos, sólo han servido para alejarme más de la humanidad que, al saberme apático a sus ritos, más se alejan y menos me consultan. No puedo recordar que me invitaran a unos quince más que a los de Lea y no recuerdo nada grato, si debía o no bailar, si podía o no beber, si debía esperarme en una silla a que repartieran la comida, la atención que recibía la aludida... en fin. No fui a los "quince" de mi hija y no he estado en un sólo cumpleaños, léase fiesta, de la familia, aunque de amigos, sin regalos, sin tortas y sin confetti o filacteria de feliz cumpleaños, he asistido en más de una ocasión, aunque no superan los dedos de mi mano derecha. Con una experiencia tuve y a cumpleaños si me han invitado y he estado en muchos, algunas veces sin conocimiento de ello o sólo por cumplir el protocolo. Hoy pongo de manifiesto que no celebro el mío, no me interesa el de los demás y quien esté muy contento que se ponga del otro lado de la malla que a mí esas fruslerías me parecen absurdas, ridículas, masivas y de un sabor a derrota inmenso. Con la fiesta del amor y la amistad me pasa que no necesito una razón para tomarme una botella y compartir con la familia y mismas razones van para navidad, cuaresma, semana santa, día de la mujer, del padre, de la madre o de cualquier estupidez que se inventen. Por ahí me llamó Luz A. "Feliz día del músico" y le dije que no necesitaba una razón tan cursi para dirigirme la palabra y que si pensaba que cada oficio, profesión y enfermedad necesitaba de un día para celebrarlo o condonarlo, feliz día de la idiota y, felizmente, no me volvió a hablar. Yo sé que los más allegados la tienen clara y no me condenan a llamarlos idiotas, aunque la verdad lo hago con gusto y por ello se resguardan de invitaciones pendejas, hoy con más razón que les escribo esta carta de conjuro, invocando mi sagrado poder de la soledad y conminando a cada humano de mi especie a que se guarde sus días, a que celebre sus ritos lejos de mi presencia y a que no me insulten con una invitación a cumpleaños, fiesta, entierro, babyshower, carshower, conyushower, cumpleshower o similares, que pienso que todas son reuniones de recaudación o donatones, por lo demás que con lo único que aún les pudiera ofender es invitándolos a mi sepelio, pero que, con buena planeación y ciencia, no se enterarán ni sabrán nada de mí, ni por mí y que si asisten aún a sabiendas de mis pretensiones de no dejar mi cadáver a los buitres de la religión ni a los enemigos que bailarán sobre mi tumba, volveré de entre los muertos a halarles las patas cada día del resto de las suyas.
viernes, 18 de septiembre de 2020
Se murió la seriedad
Hablamos hoy de seriedad y la cosa es que si "se murió la seriedad" no es porque todos estén muertos de la risa y menos porque no exista. Hablamos de seriedad y claro que hay un cierto tono de sala de concierto, silencio y respeto cuando algunos enumeran sus funciones "Rector público o privado" "Senador de la república" "alcalde interino" "Magistrado de la corte suprema" "Actor"... Otros son menos grandilocuentes: "Tendero" "Activo de Servicios generales" -eufemismo para barrendero profesional- "Profesor" "Candidato" "Taxista" "Lustrabotas" "Ama de casa"... Y todavía hay otros menos afortunados: "Bazuquero" "Habitante del cartucho" -perdón por el anacronismo- "Carterista" "Raponero" "Sicario" "Conductor de Uber" y hay otros igual de dignos: "Desplazado" "Indigente" "Habitante de calle" "Mendigo"... Para aguar el día basta con imaginarse la labor de un actor que hace de "millonario, héroe y filántropo" o el que hace de "Siempre estoy enojado". ¿Existe la seriedad cuando los adultos ganan millones por interpretar personajes ficticios y hacer el bobo frente a una cámara? A mí no me digan que si por hacer el bobo pagan ustedes lo hacen, yo lo sé. Pero, en serio, ¿eso es seriedad? Existirá la seriedad en un país que juega con el dinero de la gente con préstamos irredimibles, con condenas de charla, con arrestos de hogar de 4.000 kilómetros cuadrados y piscina, sauna y guardaespaldas incluidos. ¿Será que existe la seriedad en donde cada gobernante sale a decir mentiras sobre lo que ha hecho y ensalza su bancada como "incorruptible" o cuando la televisión oficial pretende que "todo está bien" y que "mejorará" mientras oculta la desgracia general que acentúa con un caso que se logró colar entre redes presentándolo como "todos contra la corrupción" para quedar en el inconsciente colectivo de que ayudan y son "buenos"? ¿O cuando presentan un caso que la ley "resolvió" que, aunque no mejora nada, demuestra la utilidad de nuestra policía nacional? ¿seriedad que cada dirigente aproveche coyunturas para hacer demagogia e hipocritamente se comercialice como "mejor mandatario? No existe la seriedad con canales que sólo presentan para el consumo humano, una tonelada de telebovelas para telebobitos, ni donde cada candidato, electo o no, juega con los dineros del erario. Luego dicen que estamos mal en educación cuando la educación que ellos asumen es la brutilización -aún más- del producto interno. No existe la seriedad cuando un presidente electo pretende ocultarse detrás de "homicidios colectivos" y prefigurar que "nunca se han ido" y voltear todas sus promesas en perlas de ignominia escudado por un estado de emergencia. Ni existe la seriedad cuando trata de hipócritas a los que no reconocen un daño social cuando él mismo no reconoce su calidad como segundo o tercero al mando o su calidad de presidente electo con dineros del narcotráfico y de las familias dueñas del país. ¿Cuál seriedad cuando no hay comicios válidos que sustenten tanta ignorancia y tanto poder de dictador, aunque esté manejado por un tercero? La seriedad es una chanza entre pares. ¿Será seriedad 11 años para un proyecto y ver la gente tan contenta y tan dispuesta a recibir migajas sin averiguar cuantas malas inversiones y despilfarros ha habido en ella? ¿Cuantos hay enrriquecidos con esos dineros y porque la dilatación del proyecto? ¿Seriedad es que inicien proyectos que darán 10.000 empleos, cuando la realidad es la cantidad de dinero que se robarán bajo cuerda con lo que podrían generar 30.000 empleos más? Lo único serio aquí es la marginación y el olvido, la amnesia general que cuando se cura no ve el mal, borreguitos de dios que ponen la otra cara al bofetón y perdonan al agresor por nada. Un pueblo entero enseñado a perdonar y a olvidar. ¿Puede haber seriedad en condenar por un robo de hace quince años para ocultar los robos de hoy? ¿Hay seriedad cuando lo más importante es la reactivación del balón y de la bicicleta antes que el alimento y la estabilidad laboral? ¿La habrá si abren primero los antros de adoración que las escuelas? ¿la hay si es primero la liberación de un capo que la solución interna de desconsuelo y hambre? !Por favor¡ La seriedad está muerta desde que la propaganda política demagógica no tiene censura y cualquier palurdo dice todas las mentiras que quiera sin tener que responder por ellas. La verdad sobre si hay ñeñepolítica, narcopolítica e hidroituangopolítica se discutirá dentro de 30 años que los responsables estén muertos y ya hayan hecho suficiente daño irreparable. A los capos se les conoce, pero son intocables. Seriedad, seriedad, seriedad. Hay que repetirla para saber si no está vetada del diccionario o sí ha cambiado su significado, es probable que con la evolución del lenguaje deba evolucionar esta palabra que hoy es sinónimia de payasada y de burla. De descaro, de ignorancia y de normalidad social.
PS: Profesor es eufemismo para "niñero" o "repetidor de la norma democrática y social".
lunes, 14 de septiembre de 2020
Harto de mí mismo
Me doy cuenta con desgano que absolutamente todo el mundo me parece un montón de idiotas, lo que me incluye. Por días he ido viendo gente que me saluda y me habla sin parangones o con ellos, pero que me pongo a analizar los parangones o la ausencia de ellos y no me parece más que una estupidez lo que han dicho o lo que dejan de decir; sus actuaciones, sus payasadas o sus preguntas. No era raro que por mi formación apática y malgeniada lo sintiera así de algunas personas, lo curioso es que ahora me pasa con todos. En verdad pienso que preguntar es una tontería, basta con pensar en lo que el otro hace y podemos deducir lo que está pensando o lo que quiere, creo absolutamente que puedo ahorrarme la interacción, hablar es un sucedáneo del aseo social y qué pena el clisé. Íbamos en el taxi, el chofer se había subido cambiando un billete. Al bajarnos en el punto destino nadie hurgó en el bolsillo. ¿Para qué pregunto lo obvio? Mi compañero contrató un taxi prepagado y lo pagó mientras esperaba que yo bajara del apartamento. Ofrecí sin hablar, mandando la mano a mi bolsillo, algo de dinero, obtuve una contestación. "Después arreglamos". Si no vamos a hacer preguntas tontas, deberemos permanecer en silencio. Toda pregunta sobra. Sin más podría decir que me hartan todas las posiciones de los demás y las mías que escribo aquí, qué si sí o qué si no, que yo hago esto y aquello, que yo prefiero Avengers, que a mí los héroes me parecen estúpidos, que las películas son una mierda, que sin ellas no puedo vivir, que voy para una premier... Así sobre cualquier tema, cada uno con sus queridas y sus aberraciones cromáticas, cada uno con sus pros y sus contras o con sus sí o sus no. Secos. !Qué pereza la defensa de mi postura que también vale una mierda¡. Aquí es donde me pregunto: ¿Qué me hace seguir escribiendo? Me despierto cada mañana con algo en la mollera, pero si me detengo a pensar lo que voy a escribir, supongo que no vale la pena, que otros ya lo han dicho, que mis puntos son altisonantes y sobran, que muy a pesar de que lo exprese, nadie tiene porque actuar en consecuencia, qué no es necesario que el otro se entere de lo que fluye en mi cerebro o de que su capacidad de raciocinio aún funciona o mejor, que no funciona. Hastiado de la normalidad civil que barrunta por donde todo el mundo lo hace, que pide lo que los demás piden, a fuerza de sonar repetitivo, que tienen la malgastada "opinión pública". El que a pesar de no adorar esfinges ni muertos escribe sobre ellos, el que se dice anarquista para violentar a los demás, el que cree ser algo más que un humano simple y corriente, el que se apega a hacer un comentario por hacerlo. ¿Qué es un comentario en una publicación sino la reafirmación de un yo que sigue? ¿A quién queremos mostrarle nuestra presencia y nuestro yo que aprueba o desaprueba como un dios? ¿Qué se mueve en las entrañas circunvolutivas del que deja un "like"? Yo no pretendo saber, con la información que tengo y unas cuantas reacciones extrapolo a toda la humanidad porque toda la humanidad es una grey tocada por la virgen de Atocha y el niño Jesús de Praga y cité dos porque no me sé las hijuemil advocaciones cristianas y colocar más sería jugar con la seriedad. No concibo la genialidad de los productores de películas, no la veo en los dos millones de canales de youtube, no veo la música como un don -todo el mundo sabe tocar un instrumento y aparte de jurar que son buenos se lo creen- o a la letra cantada como una osadía y un himno. El rock es todo igual, nada suena diferente y ¿qué podría decir de la otra música? El apego por una u otra canción que sentimos nos interpreta es otra torpeza general, llevada al culmen por una gran mayoría, que justamente es la que se encarga de elegir por el método "People choice awards". Seguramente si "Nature" o "Annalen der Physik" se basaran en este concepto para sus artículos, lo que publicarían sería un compendio religioso y una sarta de creencias estúpidas convirtiéndose en revistas de chismes. La esperanza no me corroe, no espero nada, pero me sigue asombrando que existan personas con ella y que lo esparzan a los cuatro vientos o me asombra que vivan de ella y se alegren por cosas tan nimias como el arresto domiciliario de un prócer o su defensa o las marchas a su favor o las marchas en su contra. Vanas esperanzas... de todos. "Volvemos a la normalidad" y todos brincan y se abrazan como si la palabra fuera orden y paz; "día sin IVA" y se regocijan de la magnanimidad de los líderes que impusieron el impuesto; "Salió la vacuna" y hacen fiesta como si ya se las hubieran aplicado. ¿Soy Garrik o Plauto? ¿Arquíloco tal vez? No. Soy Jaime, James, Jimmy, Jim... un bato cualquiera y entonces ¿Por qué me peso tanto en la conciencia? "el tiempo lo pudre todo" y la muerte todo lo cura. El tiempo ya me pudrió y seguramente, la muerte me curará de todo.
domingo, 13 de septiembre de 2020
El buen señor
Llegué esta mañana a enterarme de lo ocurrido hace dos noches. A un "buen hombre" le aplicaron un arma TASER que es un arma que propina una descarga eléctrica de muchos voltios y de poco amperaje. Un ciudadano dió aviso que se estaban incumpliendo las normas de la cuarentena ilegal y de inmediato los hombres de la ley, haciendo uso de sus recursos humanos y de su ética laboral, deciden ser jueces y jurados -obvio que también verdugos- y de nada les sirvió ruegos y porfavores. Me encantaría ver cuantas quemaduras le cuentan en medicina legal -si es que se las cuentan- para que ellos puedan alegar que sólo estaban "aplicando la ley". Luego, al parecer, se organizaron protestas que nos recuerdan las realizadas en Estados Unidos por la muerte de George Floyd en Mineapolis y por la parálisis permanente de Jacob Blake en Kenosha. Hasta ahí la noticia. Nada raro que en Colombia pasen esos "abusos" constantemente sin que quede registro fílmico, pero ahora con tanto selfómano puede verse en tiempo real los abusos de estas pécoras, ahora se dan a la tarea de difundirlos y de salir a protestar por ello. Si me preguntan yo diría que esa chispa es algo común en el simio imitador a la manera que lo emplea Vallejo. Sin un ejemplo de rebeldía del cura párroco de Dolores, nunca hubiésemos levantado armas contra la vieja escuela del reino. El polvorín de la liberación del yugo español ocurrió más o menos así. Ya sé, nadie me peguntó. Igual, yo no le veo el arrebato sino a lo demás ¿es bueno protestar si me pisan? Obvio, lo decimos a cada rato. La protesta contra todo aquello que nos oprime es válida y también deberíamos ser libres de darnos un balazo en la sien o en la boca y de arrojarnos a la calle sin cinturones de seguridad, ni cascos, ni chalecos reflectivos... Yo respeto la soberanía de este maldito país porque no puedo arremeter contra ellos como quisiera o soy el cobarde más grande de todos. Pago mis impuestos, mis multas y mi mercado, lo mismo que mis prediales y servicios públicos... Otro cuento es que inmediatamente se pronuncian los representantes del gobierno y los policías jefes e intermedios que no saben ni hablar se disculpan y citan el caso como si fuera un cuento de todos los días: "El susodicho se negó a presentar su cédula y agredió a nuestros uniformados con palabras soeces y saliva denigrante. Fue llevado al centro de detención donde presentó problemas de salud e inmediatamente fue llevado al centro médico donde, infortunadamente, llegó sin signos vitales" y la burgomaestre de Rolotá dice claritico: "un abuso policial es inaceptable", cómo se ve que no le ha tocado andar las calles colombianas. Los únicos que vieron un policia bueno fueron los amigos de Radikal Hardcore pero también decían "madero bueno, madero muerto". Yo en el único sitio donde veo un policía haciendo algo bueno es cuando pasan esos infomerciales noticiarios que halagan desmedidamente a un hombre que hace algo correcto en una labor para la que fueron creados. El presidente dice que no se puede estigmatizar a la policía y que una manzana podrida no daña todo el bulto y hasta jura que Colombia está orgullosa de su PN. Yo estaba escribiendo sobre la seriedad y me paré a decir unas cuantas cosas que me nacieron de repente, pero orgulloso de esa basura podrida no he estado, no he visto nunca un policía que no abuse de su uniforme y que no delibere quien puede quedarse rompiendo la ley dependiendo de la denominación del billete que le ofrecen. Nunca los he visto con buenos ojos porque eso me enseñaron ellos al mirarnos con malos ojos y al tratarnos como basura en donde nos encontraban o nos amenzaban con matarnos o simplemente nos insultaban sistematicamente. Tampoco creo que las armas no letales sean malas, creo que son mejores que un arma de fuego y que la letalidad de tales armas está en manos del usuario. Un burro con una granada de gas lacrimógeno o un aturdidor sólo hará de su nombre un usuario. ¿En qué queda? En promesas de reformas, en buscar a los culpables, en ahorcar laboralmente a los dos que están en cámara, aunque al principio los pusieron a hacer trabajos de escritorio y luego les despidieron, según leo y escucho, aunque ahora sólo hablan de una suspensión, ahí la complicidad y las manzanas podridas tienen que ser muchas, si no es que todas, unos por complicidad y otros por encubrimiento. Lo más seguro es que para imitar, inventarán una especie de espasmo muscular para conmemorar y desagraviar la muerte del "buen señor" y que ejecutarán por un tiempo ante la cámara del noticiero para que vean que si se acuerdan y saben como pungen esos aparaticos. Lástima que el "buen señor" no dijo nada que se pueda convertir en lema como "i can't breathe" o saldrán muy pronto un tapabocas que diga "por favor" y "lo están grabando". ¿Acoso? ¿injusticia? Eso es lo que da rabia, da impotencia y hasta miedo, tal vez no tengamos razón, pero yo no quiero ser custodiado por esa fuerza de criminales impúdicos, ni gobernado por estos tórtolos faltos de seriedad que sólo ven la viga en el ojo ajeno, buena razón para volverme a mi encierro, aunque no sé si me encierro yo o encierro al mundo que es un manicomio lleno de sociópatas funcionales que lo dirigen mientras dictan, con cara de seriedad, lo que se volverá noticia.
PS: Las armas no letales o menos letales deben su letalidad al usuario, nunca al arma como tal.
PS 2: Si el "buen señor" tenía un nombre y también lo tienen los otros siete muertos de anoche y las miles de víctimas de la ley, por eso dejo al "buen señor" con el nombre de Javier Ordoñez y póngale también otras víctimas que han sido, sin dudarlo, "buenos señores".
PS 3: Cuando digo sistematicamente me refiero a, en orden alfabético: los "gonorreas" iban primero que los "hijueputas" y estos antes que los "malparidos". Una vez en el periodista uno de esos hombrecillos verdes de algún rango medio porque se daba ínfulas de ser el súper policía, rabiando de calor, dijo refiriéndose a nosotros: "Ojalá nos dieran permiso de matar todo este montón de gonorreas para acabar con esta manada de mariguaneros" Camilo que andaba conmigo no pudo completar la frase de respuesta porque sabía la bestia sangrienta que toreaba. ¿Y cuántas veces no los vi yo empuñando ese maldito revólver sobre la cabeza de alguno de mis colegas mientras le rezaba el código del mandamás? Dije revólver, si, cuando usaban esa dizque joya llamada Smith and Wesson calibre 0.38 de pulgada y que apodaban "coleratón".
PS 4: Lo que llaman aquí "ley" es un cañón que dicta órdenes que no pueden ser contravenidas.
PS 5: ¿Saben qué es más doloroso todavía? que hay gente que los defiende a capa y espada, igual que a esta sarta de políticos corruptos expertos en aprovechar las noticias a su favor o en pervertirlas para que lo sean. Creo que a eso es que llaman demagogia y hay varias universidades que la dictan.
PS 6: Ha habido bastante movimiento, "desmanes" dicen sin parar las noticias y ahí no veo más que el "florero de Llorente". Un pueblo harto de los abusos gubernamentales, del exceso de tedio, de ignominias constantes, ve la oportunidad de desquitarse y lo hace. Entendiendo que el arma Taser es uan distracción. El "buen señor" presentó fracturas multiples en la cara y un hígado desecho "inexplicabelmente" producidas por un arma eléctrica.
jueves, 10 de septiembre de 2020
Ética para animales
domingo, 6 de septiembre de 2020
El día de la muerte social
Es difícil resumir el problema del aislamiento y de sus repercusiones en la salud mental y aún más el de repetir por completo una disertación como estas. Muy atrás en la historia, mucho antes de ser homo sapiens, el contacto social y los grupos eran buscados con avidez por los individuos, la seguridad que de la manada se desprendía era un aliciente más que suficiente para convertirse en sociedades cuyo contacto representado en el acicalamiento social, en la casta -existen rituales de contacto para las demostraciones del macho alfa- en el juego y en el amamantamiento, promovían como un bien, la cercanía de otros de la misma especie. El antecesor de los humanos debió romper un tabique inmenso, el hecho de tener un largo embarazo y aún así necesitar muchísmos cuidados de sus progenitores para poder sobrevivir -un truco que se llama neotenia o altricialiad primaria y que consiste en que el niño recibe mayor atención y recibe beneficios por ello, para enfrentarse a su mundo- lo que debió influir y retroalimentar esa necesidad de contacto, que, para bien o para mal, beneficia a ambos implicados. Es bien sabido que niños cuyo contacto social es limitado durante ciertas edades, sufren de problemas de comportamiento, que si bien no son permanentes, son determinantes en el aprendizaje y en la comunicación. Ahora que entendemos la necesidad de contacto social y regresamos a este sistema de aislamiento que algunos cumplen por necesidad, otros por miedo a las multas e incluso algunos más como parte de su proceso o por real miedo a la enfermedad. El caso es que estamos a merced de las reuniones por red y las conferencias virtuales y del sexo con un "datasuite" que no llena las expectativas de dopamina y menos del sexo cibernético, para que el evento se vuelva ameno, es necesario involucrar todos los sentidos en una sinergia completa para satisfacer la necesidad de "contacto físico". El hombre cuyo comportamiento está determinado por la necesidad de contacto, por la ternura y por el aseo social, hoy representado en la fiesta, en el baile, en la discoteca, en el chisme de barrio, en la reunión de amigos en la esquina, en el flirteo lego en el parque, en la convivencia en bloques de concreto que llamamos ciudades, en el brindar con el pequeño grupo de amigos, en la exhibición de "dotes" para mostrar la capacidad de reproducción ante las hembras, se ha vuelto precario y esa necesidad no cubierta, le convierte en un ser apático que sufre de mil adversidades: nervios, depresiones, psicosis, esquizofrenias e inseguridades: el padre histérico por no poder salir a la esquina con sus amigos; la madre llevada al límite de sus obligaciones de cocinera y ama de casa, función de la cual, bajo el sistema actual, ya no puede evadir; padres cansados y hartos de convivir todos los días y a cada hora con los hijos, padres propios y parientes -un poco como los lemmings aquellos que huyen de una sociedad atestada, aunque sólo sea un referente y no una realidad- el esposo que no siente lo mismo al tener sexo con su esposa porque debe verla todo el día, el hablar solo, mayor síntoma de soledad, se convierte en una duda de cordura para sí mismo y la pregunta cuestionable sobre si vale la pena o no permanecer en estas condiciones o si saltarse la tapa de los sesos por la falta de "contacto" real o saltar al vacío desesperado por un cambio. Escaparse con el reproductor de audio funciona por unas horas, la reunión virtual descansa de la monotonía de los espacios vacíos, la serie disfraza la soledad en una familia ficticia, la novela o la película disimula los estados de ánimo pero no sacia la necesidad de contacto. Drogarse o emborracharse sólo aumenta el problema que oculta por unas horas... Llegará el día en que el hombre se acostumbre porque su segundo nombre es adaptación, pero aún nos resta mucho para convertir la necesidad de contacto en una cosa del pasado. ¿qué pues hay de raro en la nueva normalidad? que va en contra de los instintos más primarios de contacto físico. Ahora, si me salen con que hablar con uno mismo es un problema, creo que ya hay bastantes problemas entonces para sumarle el de querer dialogar con otro, nada tiene de raro que uno hable solo o consigo mismo, el hombre que no se interroga no está pensando y si el tema es profundo el interlocutor representado en la propia voz es el mejor interlocutor posible. Yo debo reconocer que lo que me he contado no ha salido de mí y que en el silencio de mi casa, ni cuenta me doy que me dirijo la palabra hasta que algún marisabidilla -algún visitante curioso- dice: "Hey, con quién hablás. ¿Te enloqueciste?
PS: En mis koanes se perfila que "hablar conmigo mismo es una señal de cordura" y que aquel que no se interroga debe tener un problema de locura. La sociedad y la psicología dicen que aquel que habla solo está loco o esquizofrénico y mi "documento público" es apenas una explicación somera para que no huyan de mí quienes me oyen discutiendo responsabilidades conmigo mismo o disertando sobre un problema matemático o mecánico.
PS 2: Por segunda vez debí redactar el pensamiento. Por segunda vez en el tiempo que llevo escribiendo, se me pierde un documento completo y a ello me refiero al inicio. Recuperar lo que dije antes es imposible, pero la idea general se conserva.
PS 3: Es determinante que cuando el león es alimentado en su jaula, no sacia el instinto de caza. Le falta la persecución, la adrenalina, el riesgo, la satisfacción.